Jaime GUERRERO
OAXACA, (pagina3.mx).- En la revisión de las Cuentas Públicas 2014, 2015, primer, segundo y tercer trimestres del 2016 se detectaron irregularidades por más 114 millones de pesos; sin embargo, en todos los dictámenes la ASE emitió dictámenes con salvedad, argumentando que habían sido “solventados”.
En ese entonces y en el gobierno de Gabino Cué, la Auditoría Superior del Estado (ASE), estaba a cargo de Carlos Altamirano Toledo, quien solo pidió a la Junta de Coordinación Política de la LXIII Legislatura -en junio del 2017-, autorización para realizar procedimientos sancionatorios desfasados que en algunos casos ya han prescrito.
Al respecto, al Presidente de la Mesa Directiva del Congreso del Estado, Jesús Romero López, consideró que Altamirano Toledo puede ser sujeto a procedimientos penales por presuntas acciones ilegales u omisiones en la función de su encargo.
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