Saúl Salazar/@SalazarBalbuena
HUAJUAPAN DE LEÓN, Oaxaca.-Habitantes de las colonias San Miguel y Santa Isabel, exhortaron a miembros del Ayuntamiento de esta ciudad para que rehabilite el parque deportivo José López Alavés, cuyas instalaciones están en el abandono y el lugar es refugio de algunos vándalos que lo utilizan para realizar tropelías, denunciaron.
Los inconformes relataron que el sitio, el cual debiera ser de esparcimiento, está lleno de maleza, los vidrios de ventanas, puertas de baños y la caseta de vigilancia se encuentran destruidos, mientras que sus juegos infantiles están inservibles; todo ello representa un peligro para quienes tengan la intención de utilizarlos.
En un recorrido por la zona se puede observar que las paredes se encuentran con grafitis, al igual que el letrero donde se informa a la población sobre el presunto costo de la obra.
Parte del concreto de la cancha de basquetbol presenta un asentamiento y los edificios, en poco tiempo, podrían colapsar por el mismo problema.
Así también, un área de la cerca que delimita el parque se encuentra dañada, y la cancha de futbol presenta agrietamientos los cuales, con el paso del tiempo, van en aumento.
El espacio luce sin personas, ya que algunos padres optaron por prohibir a sus hijos acudir a esta área “recreativa” del municipio, pues temen que sus hijos puedan ser víctimas de los malhechores que acuden al lugar para drogarse, según versiones de los vecinos.
Los habitantes refieren que anteriormente no había iluminación, pero ahora, ya una persona se encarga de encender las lámparas cada noche, para evitar que siga siendo destruido.
“Este tipo de lugares están olvidados por el gobierno municipal, aunque fue hecho dos administraciones municipales anteriores, no vemos interés de la actual por rehabilitarlo”, expuso uno de los vecinos.
Inés López, consideró que también se encuentra en estas condiciones debido a la falta de vigilancia de Comisaría de Policía y Vialidad Municipal de Huajuapan, por lo que consideró es necesario que se realicen rondines constantes.
Otros vecindarios que omitieron proporcionar sus nombres por temor a represarías, solicitaron a las autoridades locales que se reparen las instalaciones de esta área recreativa, con el fin de que sea nuevamente utilizada y no sólo sirva como refugio para algunos vándalos.
Denunciaron que en las asambleas para elegir cada año a su presidente de comité de la colonia San Miguel, no les dicen nada sobre el abandono del parque: “No sabemos si lo van a mejorar o definitivamente será destruido para que los rateros ya no se escondan ahí”.
El parque se construyó sobre lo que fue un tiradero a cielo abierto con mas 15 años de funcionamiento, el depósito fue cerrado definitivamente en el mes junio del 2014, durante la administración de Francisco Cirigo Villagómez, para evitar una multa de 900 mil pesos, por el Instituto Estatal de Ecología (IEE).
Se empezó a edificar en el mes de julio del 2009 y culminó en diciembre del mismo año, siendo inaugurado el 4 de enero 2010 por autoridades de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) a través del programa Hábitat y de la administración municipal 2008-2010, encabezada por Martha García Manzanares.
La inversión total por parte del municipio y del gobierno federal fue de dos millones 125 mil 237 pesos, supuestamente en beneficio de 6 mil 100 habitantes.
Al respecto, Ángel Roberto Martínez Martínez, presidente del comité de la colonia San Miguel, quien fue elegido el pasado 13 de febrero, dijo que el anterior presidente, Luis Herrera, no ha entregado la documentación del parque.
Espera encontrar algún documento donde se diga qué estado guarda el espacio o qué gestiones se han hecho para que sea rehabilitado.
“Aquí todos sabemos que donde fue construido era un basurero y meses después de su inauguración empezó a presentar daños en su construcción y a ser destruido, no puedo decir que gestiones se han hecho para que nos ayude la autoridad, pues no me han hecho entrega de la documentación”, señaló.
Finalmente dijo que autoridades encabezadas por Martha García Manzanares, llegaron a ofrecerles la obra, para tratar de tranquilizarlos, pues se habían manifestado de los daños a la salud que en ese entonces provocaba el basurero municipal.
