Jaime Guerrero/ cuartaplana.com
Oaxaca, Oax.- Con el dolor de haber perdido una hija en un artero asesinato violento y la falta de justicia por la dilación procesal, la periodista, Soledad Jarquín Edgar, criticó al Fiscal General del Estado, Rubén Vasconcelos Méndez, en su desempeño en ese organismo autónomo.
“Como madre de María del Sol, no tengo un resultado concreto. No lo hay. Lo puedo afirmar y se lo digo a la cara y lo puedo mirar a los ojos también. Usted no me ha dado un solo resultado”, asestó.
Este miércoles, el abogado del Estado compareció ante la Comisión de Administración y Procuración de Justicia del Congreso del Estado, para informar sobre el caso de la muerte de la comunicadora, María del Sol Cruz Jarquín, a casi tres años del hecho en el que también perdiera la vida la candidata a Sindica del PRI, Pamela Teheran y su chofer, Adelfo Guerra.
Visiblemente consternada, Jarquín Edgar reiteró que el día de los hechos, el Fiscal prometió cumplir con su trabajo y vía telefónica le pidió que no incinerara el cuerpo de su hija, como inicialmente pensamos en la familia, porque él mismo –dijo- me entregaría a sus asesinos y su cuerpo era evidencia, recordó la periodista.
“Mucho se ha roto la confianza con el fiscal aquí presente. No sólo ha cuestionado mi demanda, sino también a las personas que me han acompañado en la búsqueda de justicia para María del Sol, y con ello la justicia para las otras víctimas de aquel 2 de junio: Pamela Terán Pineda y Adelfo Jiménez Guerra”, expuso.
📷No hay justicia en el caso de María del Sol, asegura su madre, Soledad Jarquín, quien añade que no hay avances concretos y acusa al fiscal general del estado de faltar a su palabra de hombre y a su misión como funcionario público.
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— Estación Foto (@estacionfoto) December 16, 2020
Aseguró que en 925 días, la Fiscalía ha conformado un expediente criminal de casi 900 páginas y afirmó ante diputado de Morena, PT y el PRI, así como un grupo de activistas que, no tiene hasta hoy una sola línea de investigación concreta o no las ha querido fijar, porque no ha seguido ni lo evidente ni lo que ha surgido en algunas de las entrevistas realizadas para la “investigación” que dicen llevan a cabo.
Reveló que en febrero pasado, en la última reunión que sostuvo con el titular de la Fiscalía, le pidió que hablar en privado sobre un “asunto” que estaba pasando y que no parecía correcto. Días más tarde, la persona de la que le había planteado el problema le llamó por teléfono para preguntar del asunto. “Supe entonces que no podía confiar en el Fiscal”, lanzó.
Recordó que de dos detenidos uno no fue vinculado a proceso, porque de acuerdo con el Tribunal de Justicia del Estado la investigación no se realizó de manera correcta. Actualmente, hay una sola persona vinculada a proceso desde hace 18 meses.
Tras relatar una serie de pasos procesales que aseguró son fallidas, afirmó que casi nada se ha avanzado en el caso de su hija. “Lo que si existen son tropiezos”.
Jarquín Edgar criticó también que el titular de la Fiscalía, no reconoce el asesinato violento como feminicidio, pese a lo que se establece en diversas normativas internacionales –como la CEDAW- y nacionales -como la Ley Nacional para a una Vida Libre de Violencia para las Mujeres-.
Reprochó que se desvincule el contexto político-electoral en que sucedió y los delitos electorales que se cometieron por parte de quien era funcionario del gobierno estatal, Francisco Montero y su hermano, Ageo Montero, hoy regidor en Juchitán de Zaragoza.
“La fiscalía en lugar de castigar a los delincuentes electorales castiga a una madre al no permitir ser parte de ese proceso. Y que, como ya se dijo, está entrampado. ¿Sabían ustedes que en este país no hay una sola persona en la cárcel por cometer delitos electorales? Eso a pesar de que a mi hija le costó la vida”, dijo.
Y sigue sin castigo, agregó, pese a estar identificada a plenitud, la persona que se robó el equipo de trabajo de su hija, otro ex funcionario de la entonces Secretaría de Asuntos Indígenas.
Ante los diputados de Morena, PT y Morena, acusó que como víctima indirecta la fiscalía le ha negado el derecho a estar plenamente informada del caso al no notificarme de las acciones emprendidas.
Culminada la comparecencia, protegido por su séquito de “guarda espaldas”, el Fiscal abandonó el complejo legislativo.
