NATHALIE GÓMEZ/@Nathalie_fx
Huajuapan de León, Oax.- Familiares y amigos de la señora Martha Jorgelina Ramírez Bazán, quien falleciera el fin de semana a la edad de 73 años, la despidieron en el panteón Jardines del recuerdo, recordándola como una mujer siempre trabajadora, disciplinada, entregada a su trabajo y a sus sueños.
La música de mariachi y de los Amigos del arte, canto y poesía, acompañaron a los dolientes y a doña Marthita, como le decían con cariño. Fue fundadora de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac) delegación Huajuapan.
Luego de ser velada durante dos noches, la primera en la iglesia del Sagrado Corazón de Jesús y la segunda en la casa de sus padres en la calle Bravo, la misa de cuerpo presente se realizó en el mismo templo y luego, el cortejo se dirigió a Mariscos Víctor´s, el negocio que junto con su familia, emprendió y consolidó.
Posteriormente, se dirigieron al panteón Jardines del recuerdo de la colonia Del Maestro, donde, con canciones como Amor eterno, Señora, Dios nunca muere, un popurrí de boleros, entre muchas otras, le dijeron “hasta pronto”, y le agradecieron el gran legado que les dejó.
El sector restaurantero la recuerda con mucho cariño, reconociendo en ella su capacitación constante, su trabajo incansable, el ser muy participativa en todos los eventos de la Cámara a los cuales nunca dijo no, “siempre decía, vamos a hacerlo y en qué apoyo”, compartió el presidente de la cámara, Óscar Alfonso Pérez García.
“Además, fue una persona que nos motivó mucho a las nuevas generaciones; nos platicó sus comienzos, cómo fue que inició su empresa, además de que nunca faltó a una sola de las capacitaciones que se han organizado”, abundó.
Agregó que es de las pocas personas que, “en capacitación que se hacía, ella estaba en primera fila, así fueran temas que ya hubiera tomado, ella ahí estaba, lo que a veces las nuevas generaciones no tomamos mucho en cuenta, pensando que si ya se nos preparó en un tema, ya lo sabemos y ya no asistimos”.
El mismo compromiso, lo reconocen en cuanto a su personal, pues mandaba a todo su equipo a los cursos, charlas y talleres que se llevaban a cabo, en bien de su empresa, “y por ello vemos a un personal que tiene bien puesta su camiseta con ella, porque los consideraba parte de su familia”.
Por ese ejemplo que les dejó, los integrantes de este gremio consideraron que, junto con su familia, continuarán trabajando para seguir el legado que les dejó, ahora en su memoria.
La familia, que llora la pérdida de su gran roble, agradeció la presencia y apoyo de amigos y comensales que acompañaron a Marthita a su última morada.