Por Marcos Vizcarra
Sinaloa/Ciudad de México, 11 de agosto (Noroeste/SinEmbargo).– Fabiola tenía 24 años cuando fue asesinada. El principal sospechoso para la Fiscalía General del Estado se llama Ismael Adrián, de 26 años, su ex pareja.
Ayer lo presentaron ante un Juez de Control y Enjuiciamiento, con una acusación concreta: maltrató físicamente a Fabiola durante un año, intentó ahorcarla dos semanas antes del asesinato y tras una discusión la privó de su libertad, la golpeó, la amarró de pies, manos y boca, la llevó hasta la playa de El Tambor, en Navolato, la introdujo a una fosa y le dio un disparo en la sien.
Eso ocurrió el sábado 24 de febrero. Fue alrededor de las 10:00 horas.
A Fabiola, de 24 años, la encontraron asesinada y enterrada en una fosa clandestina en las playas de Yameto, Navolato. Foto: Noroeste
Fabiola conoció a Ismael Adrián hace tres años. En la audiencia no se dieron detalles de eso, sólo de lo que sucedió al final de la relación.
Ambos tenían domicilios diferentes. De hecho, ella rentaba una casa en el fraccionamiento Valle Alto, pero de forma ocasional se instalaba por periodos en casa de él, en la colonia Capistrano, al sur de Culiacán.
Él es un hombre que pasa de los 1.70 metros de altura, corpulento, con clara musculatura. Ella, una mujer que apenas superaba los 1.60 metros, de complexión delgada.
En al menos seis testimonios que se recabaron con los familiares de Fabiola, se estableció que él gustaba de tomarla y colocarla en su hombro, como si fuera un costal de papas.
Itzel, prima de Fabiola, recordó que al principio no causaba extrañeza su comportamiento, pero que con el tiempo comenzaron a ver actitudes que les llamó la atención. Por ejemplo, vieron que el tomarla y colocarla en sus hombros pasó a ser un acto de sometimiento cuando discutían o él no estaba de acuerdo con ella.
Un año antes del asesinato, ella le confesó a Itzel que Ismael Adrián le golpeaba, que tenía distintas marcas en su cuerpo provocada por golpes que recibía durante discusiones. La recomendación que le dio fue que lo dejara, que rompiera con la relación, pero expresó miedo a que sucediera algo más grave.
Sin embargo, lo intentó. Semanas antes de que ella fuera asesinada, Ismael Adrián le ahorcó con una sábana. en el cuello de Fabiola quedaron las marcas de esa agresión.
El 14 de febrero, su madre le escuchó sollozar. Se le acercó y le pidió que le tuviera confianza, que ante cualquier cosa la protegería.
Fue en ese momento cuando Fabiola soltó el llanto y le contó de todas aquellas ocasiones en que Ismael Adrián la golpeaba porque no le parecía una postura de ella. Le dijo, también, de esa vez que quiso ahorcar y que no sabía cómo alejarse de él. Le narró cada detalle como si fuera necesario dejar un testigo.
“Mami, si alguna vez yo llego a desaparecer o me pasa algo, fue Ismael”, se lo dijo a su madre después de enseñarle los moretones que tenía en los brazos.
LA HISTORIA DE ADRIÁN
El 23 de febrero, Ismael Adrián tuvo una discusión con Fabiola en un centro comercial. En una entrevista que dio a la Unidad Modelo de Investigación Policial de la Fiscalía General del Estado, señaló que ella inició una discusión estando junto a su madre.
Ambas salieron del centro comercial y tomaron un taxi.
Él dijo que trató de seguirlas, pero que no las alcanzó, y que por ello se fue a su casa en la colonia Capistrano, llenó una maleta de ropa con otras pertenencias y se las llevó a casa de Itzel, prima de Fabiola.
Luego, dijo, cuando llegó vio que Fabiola se escondió y prefirió irse, no hacer más escándalo.
Volvió a su casa y después fue a tomar cerveza con unos amigos suyos. Después de las 02:00 horas, dijo, ella le envió un mensaje para pedirle que pasara a recogerla a casa de su prima, pero que en un principio no quiso.
Fabiola fue asesinada en Novolato, Sinaloa. Foto: Noroeste
Pasaron las 04:00 horas y se dirigió al fraccionamiento Andalucía, donde estaba Fabiola, la subió a su carro y se dirigieron a la colonia Campistrano. Ahí, dijo, durmieron, pero alrededor de las 8:00 horas discutieron porque él debía ir a trabajar.
Ismael Adrián contó que en esa discusión ella le dijo que se iría a vivir con otra persona, de nombre Leo, asegurando que Fabiola tenía otra relación sentimental y que eso le enojaba.
Entonces volvieron a dormir, y cuando él se levantó a bañarse ella escapó con rumbo a una plaza comercial en la colonia Infonavit Barrancos. Después de eso, les dijo a los investigadores, no supo de ella hasta que la encontraron en una fosa clandestina.
De verdad, el silencio no era la opción
El 9 de mayo, la señora Mireya, madre de Fabiola se presentó ante el Ministerio Público, se sentó con los investigadores y les dijo que ya no aguantaba, que debía decirles que para ella y su familia el principal sospechoso era Ismael Adrián.
Les narró las historias que Fabiola le dijo semanas antes de ser asesinada.
Además, contó que su familia fue a la colonia Capistrano a pegar carteles con los datos de Fabiola, creyendo que estaba desaparecida y que ahí podían darles información.
Lo que encontraron fue distintos testimonios de vecinos que aseguraron haberla visto llorando y hablando con un hombre de complexión robusta.
Fue en ese momento cuando la carpeta de investigación cambió de ruta y encontraron que posiblemente sí sea Ismael Adrián quien asesinó a Fabiola.
LA VERSIÓN OFICIAL
El 23 de septiembre, Ismael Adrián y Fabiola tuvieron una discusión. Ella prefirió irse con sus primos, con quienes en la noche de ese viernes fue a un centro nocturno en el Centro de Culiacán.
A las 4:20 horas llegó Ismael Adrián al fraccionamiento Andalucía, donde ella dormía. La sacó cargándola y colocándola en su hombro derecho. Se la llevó a su casa en Capistrano.
De acuerdo con el testimonio de vecinos de Ismael Adrián, a partir de las 5:00 horas comenzaron a discutir y ella salió de la casa. La discusión se la llevaron a la calle, y él la convención de volver.
Apenas eran las 8:00 horas y las discusiones se mantenían, pero esta vez con sonidos de golpes que fueron escuchados por los vecinos. Nadie reportó a las autoridades.
Minutos más tarde salió a barrer su cochera y luego salió de su casa.
La Fiscalía General del Estado estableció que antes de irse golpeó a Fabiola, le colocó cinta en la boca y cinchos de plástico en los pies y la subió al portaequipaje.
Así se la llevó hasta la sindicatura de Altata, Navolato, según se documentó con imágenes de siete videocámaras, así como por las antenas emisoras de señal de celular. La última ubicada en el campo pesquero Dautillos.
La versión de la Fiscalía establece que cuando llegó a la playa de El Tambor hizo un hoyo y depositó ahí a Fabiola, luego sacó un arma y le disparó en la sien con una bala calibre .380.
Las cámaras de videovigilancia captaron que Ismael Adrián entró al bulevar que lo lleva a la zona de playas en Altata alrededor de las 9:00 horas, y que salió del lugar minutos después de las 10:00 horas.
Para las 11:30, Ismael Adrián se comunicó con la madre de Fabiola para decirle que su hija había salido de su casa con rumbo desconocido, y a partir de ese momento se dedicó a acompañarla a buscarla en distintos lugares, incluso, a interponer denuncia ante el Ministerio Público.
Fabiola fue encontrada el 8 de marzo en una fosa clandestina en las playas de El Tambor por el grupo de búsqueda de personas desaparecidas Voces Unidas por la Vida. su cuerpo tenía un alto grado de putrefacción, pero se le pudo reconocer por tatuajes que se pudieron reconocer y una prueba de ADN.
Ayer se presentó a Ismael Adrián ante un juez de control y enjuiciamiento. El Ministerio Público llegó con una carpeta de investigación con datos específicos: 7 entrevistas, 3 inspecciones físicas de domicilios y un vehículo, y 4 muestras que confirman que Fabiola estuvo en la cajuela.
Entre esas cuatro muestras, dos son manchas de sangre y dos más son cabellos de Fabiola.
La defensa de Ismael Adrián pidió 144 horas para analizar el expediente completo, así como para que se citara a todos los testigos a que se presenten el 14 de agosto en los juzgados.
La intención, dijeron los abogados, es observar si existen contradicciones en las declaraciones.
Será en la audiencia del 14 de agosto cuando se determine por el juez si los datos de la Fiscalía General son suficientes para comenzar un proceso penal, con el fin de que se recaben más pruebas y se demuestre que sí es el culpable, como lo advirtió Fabiola antes de ser asesinada.