- Fray Alfaro combinó su combi con tecnología para convertirla en una biblioteca móvil para estudiantes o como él le dice una combiteca.
Un día Fray Antonio Alfaro, un profesor de educación física, de la ciudad de Comitán de Domínguez, Chiapas, comenzó a ver como el número de jóvenes que visitaban la tienda de abarrotes de sus papás era más común y recurrente. Lo más extraño para él era que todos iban a lo mismo: recargar 20 o 50 pesos al saldo de su teléfono móvil.
“Como a los 8 meses de la pandemia, me llamó mucho la atención ver como todos los días iban un número anormal de niños o jóvenes a hacer microrecargas de sus saldos a la tienda. Un día de plano me acerque con ellos y les comencé a preguntar y en todos los casos su respuesta era la misma: estaba recargando para poder estudiar porque no solo ellos sino sus hermanos y hasta sus papás necesitaban conectarse más a internet”, explicó Alfaro en entrevista con Forbes México.
Fue cuando el profesor de educación física tuvo la idea de poner una carpa afuera de la tienda de abarrotes junto con un par de bancas y mesas para que los alumnos pudieran conectarse al internet sin costo alguno a fin de que pudieran descargar las tareas, conectarse a clases o bajar información para poder hacer sus tareas.
“Teníamos jóvenes de ocho de la mañana a las siete de la noche. Pero me di cuenta que la carpa no era suficiente fue cuando pensé: cómo puedo hacer este proyecto llega a más personas”, compartió.
Fue cuando con la ayuda de un amigo “que le sabe más a la tecnología”, Alfaro pintó su combi, le montó un modem y la adaptó para convertirla en una biblioteca andante con internet para los estudiantes de la región algo que bautizó como la combiteca.
Solo que en vez de cientos de libros y documentos, la ‘combiteca’ lleva acceso al conocimiento e información de internet y acceso a la plataformas de clase remotas de las escuelas.
Fuente: Forbes