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En 2015 mataron al padre, líder indígena; ahora fue él, de 16 años, apareció atado de manos y pies

Por Redacción / Sin Embargo

Veracruz/Ciudad de México, 16 de agosto (PlumasLibres/SinEmbargo).– Arturo Vásquez Domínguez, de 16 años de edad, fue hallado asesinado a un costado de la autopista Cosoleacaque-La Tinaja, cerca de la entrada al municipio de Texistepec.

El chico, que se dedicaba a repartir tortillas, apareció amarrado de pies y manos con señales de violencia, además, su cuerpo presentaba avanzado estado de descomposición.

El menor de edad fue reportado como desaparecido desde el pasado lunes. Su familia dijo a las autoridades que presuntamente había tenido un accidente rumbo a Loma Bonita.

La moto apareció, pero de él no se supo más hasta la mañana del martes, cuando se confirmó que era suyo el cadáver localizado entre la maleza sobre la carretera con dirección al camino viejo de Texistepec-Jáltipan.

El menor era hijo de Arturo Vásquez García, líder de un movimiento campesino indígena y de estudiantes.

“El Sapo”, como era conocido, fue asesinado el 12 de octubre de 2015. Sujetos le ordenaron descender del vehículo en el que viajaba  y lo ejecutaron en el Barrio Panteón de la cabecera municipal de Texistepec.

La mujer que acompañaba a Vázquez García fue encontrada por la policía y auxiliada por las personas que llegaron al lugar.

En cuestión de minutos, la escena del crimen fue copada por docenas de niños, mujeres y hombres que arribaron para lamentar la muerte del líder de quienes tomaron la caseta de Sayula. Se dijo en el lugar que en su mayoría los presentes le habían acompañado en las tomas y lloraron junto al cadáver del hombre asesinado.

Durante más de seis meses, aproximadamente, Arturo Vásquez García encabezó las tomas de la caseta de Sayula con grupos nutridos que al menos en dos ocasiones intentaron apropiarse del paso en el Coatza I y el II.

Las dos veces que arribaron a Coatzacoalcos para tomar esos peajes, fueron desalojados por elementos de la Policía Federal, Mando Único y granaderos de la Fuerza Civil.

En la zona de Texistepec, Acayucan y Jáltipan la noticia corrió por medio de redes sociales, causando indignación y temor en aquella ocasión. Hay docenas de testimonios en medios de comunicación de la localidad, en donde se daba cuenta que el grupo que lideraba “El Sapos”, llegaba a la caseta de Sayula en camionetas o eran llevados en autobuses, gran parte de ellos venían de municipios marginados en la sierra de Soteapan o Tatahuicapan.

En diferentes momentos, protestaron en contra de la Reforma Educativa de Enrique Peña Nieto, por los estudiantes desaparecidos en Ayotzinapa, Guerrero, y por apoyos para el empleo por parte de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol).

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