Saúl Salazar/@SalazarBalbuena
SILACAYOÁPAM, Oaxaca.- Una estudiante de 17 años de edad se encuentra desaparecida desde el pasado 30 de mayo, luego de que, probablemente, a través de redes sociales, fue sustraída de su vivienda ubicada en el municipio de Silacayoápam, para ser llevada a una de las “zonas rojas” de la Ciudad de México, donde existe la prostitución o sexoservicio.
Serafín Arrazola relató que la última vez que vio a su hija Monserrat Arrazola Méndez, fue el 30 de mayo pasado, a las 6:30 horas, cuando se dirigía a clases al Colegio de Bachilleres del Estado de Oaxaca (COBAO) plantel 10, ubicado en Silacayoápam.
Agregó que días anteriores a la desaparición, su hija le comentó que había conocido a través de Facebook, a Angelina Benítez López, de aparentemente 16 años de edad, misma que la había invitado a conocer la ciudad de Oaxaca,.“Ella me dijo sobre dicha invitación, pero le dije que yo la llevaría a conocer la capital del estado, pero no me hizo caso y el 30 de mayo ya no regresó a casa”.
Ante ello, empezó a mandarle mensajes vía whatsapp para saber su localización, pero fue hasta las 17:00 horas de ese mismo día, cuando al parecer le escribió que se encontraba bien.
Al temer por la integridad de su hija, empezó a buscar a dicha persona en la red social, pero ya no se encontraba, por lo que acudió a la Vicefiscalìa Regional de Justicia en la Mixteca, a poner la denuncia correspondiente, además de solicitar ayuda para su pronta localización.
En la dependencia le dijeron que tenían que pasar 48 horas para que pudiera ponerla la querella; “mientras trasscurría el tiempo, le mandaba mensajes a su teléfono celular, y al preguntarle en dónde se encontraba, me enviaron fotos de un cuarto oscuro, así como de mi hija, las cuales eran las mismas que alguna vez me enseñó y compartió”, denunció.
Alarmado empecé a llamar al teléfono, jamás contestaron, y después cuando volví a intentarlo el celular ya se encontraba apagado.
“Le conté lo ocurrido al titular de dependencia Claudio Miguel Miguel, solicitándole que localizaran a mi hija con ayuda de la tecnología GPS, pasaron las horas y me dijo la ubicación, siendo la Ciudad de México donde se encontraba, por lo que acudí a buscarla, pero me di cuenta que era de una de las “zonas rojas”, donde es posible contratar los servicios de mujeres, hombres, homosexuales y travestis”, reveló.
Al saber lo anterior decidió solicitar ayuda a la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO), pues teme que su hija sea víctima de trata de personas.
“Autoridades federales y estatales, sensibilicen su corazón, la vida de mi hija está en peligro, tengo temor que de la muevan de lugar y jamás la vuelva a ver”, finalizó.
