NATHALIE GÓMEZ/@Nathalie_fx
Huajuapan de León, Oax.- “El lado de Izúcar está muy peligroso, ahí asaltan y es posible que le hayan quitado el teléfono y no pueda comunicarse o no tenga cómo regresarse, es algo terrible lo que se piensa, pero lo que nos mantiene firmes es la fe de encontrarlo y con bien”.
Así lo expresó Marlene, hermana de Néstor Antonio Santiago López, de 36 años de edad, por la desaparición de él, el sábado pasado en Izúcar de Matamoros.
Viajaba solo, luego de cuatro meses de trabajar como jornalero en un rancho en Sonora, se disponía a regresar a Huajuapan de León.
Por ello hizo escala en la ciudad de México y ahí, salió en el autobús de la línea OCC de ADO, a las 7:00 horas del día sábado con rumbo a esta ciudad.
Sin embargo, mientras pasaba por Izúcar de Matamoros, “se bajó del autobús porque se sentía mal”, esto en el crucero conocido como Cuatro Caminos.
Eso fue lo que le informó a su hermana y madre, a través de una llamada telefónica, explicándoles que estaba devolviendo y le dolía la cabeza.
“En el momento en que lo bajó el autobús nos marcó y nos dijo, ‘me bajaron aquí en Izúcar de Matamoros porque la verdad me siento muy mal y ya se fue el autobús’, también dijo que se le iba a acabar la batería del celular, fue lo último que supimos de él”, explicó su hermana Marlene.
A partir de ese momento, su familia le ha marcado a su celular pero los manda directo a buzón, por lo que el domingo se dieron a la tarea de acudir a Izúcar de Matamoros a investigar y el lunes a interponer su denuncia ante el Ministerio Público por la desaparición.
Las autoridades les informaron que comenzarían la búsqueda, difundirían sus datos a través de volantes y redes sociales, y la familia ha hecho lo mismo con habitantes y medios de comunicación de Puebla, Acatlán, Izúcar, Cuautla, pero nadie les da razón de él.
“Estamos sumamente preocupados porque mi hermano no conocía a nadie en Izúcar, él a donde viajaba mucho era a México”, explicó, y les sorprende todavía más la falta de comunicación, porque al día se hablaban por teléfono mínimo unas 10 veces.
El boleto lo había pagado su mamá desde Huajuapan y por eso lo tienen físicamente. Con él acudieron a la terminal de autobuses de esta ciudad.
El personal le explicó a la familia que el conductor permitió que el pasajero descendiera en donde lo solicitó “pues no puede obligar al cliente a subir al camión”.
Como informaba que se sentía mal, habían acordado que cuando Santiago López llegara a Huajuapan, pues vive en Infonavit, pasaría con su boleto a recoger su maleta.
Al no ser él quien la fue a pedir, la empresa le dijo a su hermana que requerirían una identificación de la persona propietaria, por lo que la entrega tendrá que esperar pues no tienen ninguna credencial suya.
Hoy nuevamente la familia acudirá a Izúcar a preguntar qué avances existen las autoridades y a seguir buscándolo, porque ya acudieron a los hospitales y no hay nadie con su nombre ni características, incluso en Huajuapan.
Por las circunstancias, desconocen cómo iba vestido, pero es delgado, moreno claro, tiene cabello lacio, cejas pobladas.